En África el algodón no es de azúcar...

Cuando se piensa en África normalmente las imágenes son de pobreza y desnutrición, muertes y guerras…

De cada dos refugiados en el mundo, uno es africano. Sólo 3% de la población tiene acceso a Internet. Pese a sus 900 millones de habitantes, África sólo representa el 2% del comercio mundial.

Pero también en África hay más de 600 licenciados doctorados y universidades, cuyos estudiantes son bilingües y políglotas, porque el sistema escolar está diseñado para enseñar ingles y francés como idiomas básicos, además de los propios según cada etnia.

Ignacio Ramonet, (que gusto poder verlo y escucharlo de nuevo en persona), alude tres razones históricas para explicar la situación africana:

• * La esclavitud deshumanizó a los hombres y mujeres africanos.
• * Fue el último continente colonizado a finales del siglo diecinueve, y que todavía no ha logrado rescatar su soberanía
• * Los movimientos independentistas africanos de los años 60 conllevaron a un neocolonialismo conformado por una serie de Estados europeos que buscan y mantienen riquezas mineras en África. Han convertido al continente en el rincón de sus caprichos, apostando por la guerra, la división y la muerte.

Este continente se ubica entre los primeros lugares de producción mundial de: algodón, cacao, café, diamantes, petróleo, madera, bauxita, cobre, así como el famoso coltan, con en el que se fabrican celulares, cuyo 80% de reserva mundial se encuentra en la República del Congo y que ha desatado una sangrienta guerra económica.

Pero en África no hay subvenciones para la producción ni importación de productos. Sus iquezas están en manos de trasnacionales neocolonialistas. La producción compite con el mercado europeo. Amaga la necesidad que se traduce en cayucos y pirañas (balsas) que huyen sobre el mar hacia algún puerto que los reciba.

Pese a que pareciera que las desgracias de África vienen de sus propias riquezas, es un continente posible. Cada pueblo tiene su proceso. Los africanos mantienen una movilización social importante que no es informada porque, además, a las colonias y sus transnacionales les conviene mantener en silencio y a oscuras, el patio trasero de sus mafias. ¡África si es posible!